lunes, 22 de noviembre de 2010

*Como leer en familia*

Los videos siguientes, muestran la participación de los padres para reforzar el aprendizaje de la lectura y la escritura de la lengua española. Como podemos observar, este refuerzo va determinado por las diversas actividades cotidianas que se dan en casa. Por eso es importante, como he dicho anteriormente la participación de los padres, ya que son estos los que tienen un peso fundamental en que los niños en un futuro sean amantes de la lectura.


                       
                       
                       
                       

EL CUENTO DEL SOLDADITO DE PLOMO

Como intervenir para que a los niños les guste la lectura*

Cuando normalmente abrimos un libro con los niños, estamos abriendo un mundo para ellos. Los hace curiosos, les da ánimo para aprender, y les facilita el éxito en la escuela. Y lo mejor de todo es que tú puedes intervenir en ello.




Estas son algunas ideas para atraer la atención de los niños hacia los libros y ayudarles a desarrollar sus habilidades, las que les creará un buen hábito hacia la lectura.

  • Leer en voz alta a los niños. Trate de leerles cada día a la misma hora, por ejemplo, a la hora de acostarse o a la hora de la siesta. Deje que sus niños escojan la lectura. Léales en español o en inglés, lo importante es leer.
  • Anime a los hermanos mayores a que lean a los más pequeñosEsta es una manera para que los hermanos mayores muestren sus habilidades. Así, los menores aspirarán algún día a leer como los mayores.
  • Deje que los niños la vean leyendoEsta es la mejor manera de mostrarles que usted valora la lectura y que también disfruta de ella.
  • Mantenga libros, revistas, y periódicos en casa para que siempre tengan algo que leer. Lean también en voz alta otras cosas que están a su alrededor.
  • Visiten la biblioteca juntos. Pídale al bibliotecario que les ayude a encontrar libros que le gusten a los niños.
  • Dé libros a los niños sobre temas que les interesenSorpréndelo con algún libro o revista sobre su tema favorito.
  • Lleve a los niños a lugares distintos Los niños aprenden de lo que les rodea, de lo que ven y hacen. 
  • Practique rimas, poesías y canciones. Las rimas son fáciles de recordar, asi que los niños pequeños pueden recitarlas con los demás miembros de la familia sin dificultad. Las rimas también les ayudan a aprender como suenan las letras.
  • Cuente historias de su familia e historias favoritas de su niñez. Anime a los abuelos y otros familiares para que también les cuenten historias. La narración es una buena manera de trasmitir su tradición. 
  • Cuando hable con los niños, escúcheles con interés y hágales preguntas. Hablar con los niños les ayuda aprender como manejar el idioma.

10 Opciones de lectura

Muchos de vosotros consideráis que leer un libro, es la única opción que tiene un niño para leer. Pero eso no es así. Existen 10 opciones más para introducir al niño en la lectura.
En muchas ocasiones un niño no tiene en mente buscar un libro sino es que ve a sus padres o familiares hacerlo. Pero no por ello significa que el niño no puede buscar otras fuentes o tampoco significa que nosotros no vayamos a ofrecerle otras diferentes. Lo importante es conocer que es lo que le interesa al niño, ofrecerle otras maneras de aprender sobre los temas que le interesan.

A continuación os presentó algunas opciones de lectura para que los niños lean… ¡como nunca se lo han imaginado!
  1. Periódicos
    Muchos periódicos tienen secciones especiales para niños. Generalmente, los artículos son cortos, concentrados y escritos para captar la atención de los niños o están escritos desde el punto de vista del niño.  Además, es importante ofrecerle artículos en los temas en los que el niño este interesado, para que así le puedan atraer.

  2. Revistas
    Tal vez las revistas para niños parezcan un poco superficiales, pero si mantienen a los niños leyendo, los beneficios servirán para balancear la falta de un contenido más serio.  Los niños se identifican fácilmente con el tono y los tópicos de las revistas y sus artículos mantienen su atención.

  3. Libros de recetas de cocina
    Aunque al niño no le guste comer fuera, cocinar, etc. Esta es una gran oportunidad para que los niños lean. Ofrézcales un libro de recetas de cocina y un paquete de papelitos adhesivos para escribir notas y deje que  escojan varias recetas que les gustaría probar. También pueden hacer la comida juntos, como una actividad familiar.

  4. Libros de caricaturas
    Los libros de caricaturas y las novelas gráficas se están volviendo más y más populares, sus ilustraciones y temas excéntricos mantienen el interés de los niños.

  5. Folletos
    ¿Van a ir de vacaciones? ¿O solamente desearían hacerlo? Cualquiera que sea su situación, consiga folletos sobre lugares para visitar, atracciones turísticas y parques de diversiones.  Deje que sus niños lean los folletos y se entusiasmen con los eventos propuestos o un posible viaje de aventuras.

  6. La letra de las canciones
    Es muy raro encontrar a un niño a quien no le guste la música.  Tal vez él o ella ya hayan encontrado la letra de las canciones en un CD, pero es importante animar a los niños para que lean la letra de las canciones mientras las cantan.  Su niño también puede buscar la letra de canciones en el ordenador y conocer las historias del autor relacionadas con lo que le sirvió de inspiración para escribir esas canciones.

  7. Instrucciones
    Pedirle al niño que lea las instrucciones para que lo ayude a construir cualquier cosa. Las instrucciones ofrecen muy buenas oportunidades para leer y aprender. ¡Quién sabe, tal vez sus niños las entiendan mejor que usted!

  8. Las etiquetas de los productos y de la comida
    Pedirles a sus niños que lean la caja de cereal, la bolsa de patatas, las latas, la botella del bronceador, el repelente contra mosquitos o cualquier cosa que se encuentre a su alcance.  No les tomará mucho tiempo reconocer las palabras y siempre aprenderán más cuando se trata de algo que se ponen en el cuerpo o que se comen.

  9. Catálogos
    Si su niño está explorando algo que le interesa particularmente, los catálogos son una gran opción.  Desde el fútbol hasta los muebles del dormitorio, la ropa, etc., los catálogos tienen información concentrada sobre lo que llama tanto la atención de su hijo.

  10. Las etiquetas en los videos/DVD
    Cuando vaya a la tienda de alquiler de videos, en vez de escoger la película basándose en la figura que aparece en el paquete, sugiérales a sus hijos que escojan una película con base en la descripción de la trama que aparece en la caja. Anímelos a encontrar una buena historia con base en la trama y no en la publicidad.
                                                                                       

domingo, 21 de noviembre de 2010

HANSEL Y GRETEL (La casita de chocolate)


Allá a lo lejos, en una choza próxima al bosque vivía un leñador con su esposa y sus dos hijos: Hansel y Gretel. El hombre era muy pobre. Tanto, que aún en las épocas en que ganaba más dinero apenas si alcanzaba para comer. Pero un buen día no les quedó ni una moneda para comprar comida ni un poquito de harina para hacer pan. "Nuestros hijos morirán de hambre", se lamentó el pobre esa noche. "Solo hay un remedio -dijo la mamá llorando-. Tenemos que dejarlos en el bosque, cerca del palacio del rey. Alguna persona de la corte los recogerá y cuidará".
 
Hansel y Gretel, que no se habían podido dormir de hambre, oyeron la conversación. Gretel se echó a llorar, pero Hansel la consoló así: "No temas. Tengo un plan para encontrar el camino de regreso. Prefiero pasar hambre aquí a vivir con lujos entre desconocidos". Al día siguiente la mamá los despertó temprano. "Tenemos que ir al bosque a buscar frutas y huevos -les dijo-; de lo contrario, no tendremos que comer". Hansel, que había encontrado un trozo de pan duro en un rincón, se quedó un poco atrás para ir sembrando trocitos por el camino.
Cuando llegaron a un claro próximo al palacio, la mamá les pidió a los niños que descansaran mientras ella y su esposo buscaban algo para comer. Los muchachitos no tardaron en quedarse dormidos, pues habían madrugado y caminado mucho, y aprovechando eso, sus padres los dejaron. Los pobres niños estaban tan cansados y débiles que durmieron sin parar hasta el día siguiente, mientras los ángeles de la guarda velaban su sueño.

Al despertar, lo primero que hizo Hansel fue buscar los trozos de pan para recorrer el camino de regreso; pero no pudo encontrar ni uno: los pájaros se los habían comido. Tanto buscar y buscar se fueron alejando del claro, y por fin comprendieron que estaban perdidos del todo.
Anduvieron y anduvieron hasta que llegaron a otro claro. ¿A que no sabéis que vieron allí? Pues una casita toda hecha de galletitas y caramelos. Los pobres chicos, que estaban muertos de hambre, corrieron a arrancar trozos de cerca y de persianas, pero en ese momento apareció una anciana. Con una sonrisa muy amable los invitó a pasar y les ofreció una espléndida comida. Hansel y Gretel comieron hasta hartarse.Luego la viejecita les preparó la cama y los arropó cariñosamente.
Pero esa anciana que parecía tan buena era una bruja que quería hacerlos trabajar. Gretel tenía que cocinar y hacer toda la limpieza. Para Hansel la bruja tenía otros planes: ¡quería que tirara de su carro! Pero el niño estaba demasiado flaco y debilucho para semejante tarea, así que decidió encerrarlo en una jaula hasta que engordara. ¡Gretel no podía escapar y dejar a su hermanito encerrado! Entretanto, el niño recibía tanta comida que, aunque había pasado siempre mucha hambre, no podía terminar todo lo que le llevaba.
Como la bruja no veía más allá de su nariz, cuando se acercaba a la jaula de Hansel le pedía que sacara un dedo para saber si estaba engordando. Hansel ya se había dado cuenta de que la mujer estaba casi ciega, así que todos los días le extendía un huesito de pollo. "Todavía estás muy flaco -decía entonces la vieja-. ¡Esperaré unos días más!". Por fin, cansada de aguardar a que Hansel engordara, decidió atarlo al carro de cualquier manera. Los niños comprendieron que había llegado el momento de escapar.
Como era día de amasar pan, la bruja había ordenado a Gretel que calentara bien el horno. Pero la niña había oído en su casa que las brujas se convierten en polvo cuando aspiran humo de tilo, de modo que preparó un gran fuego con esa madera. "Yo nunca he calentado un horno -dijo entonces a la bruja-. ¿Por que no miras el fuego y me dices si está bien?". "¡Sal de ahí, pedazo de tonta! -chilló la mujer-. ¡Yo misma lo vigilaré!". Y abrió la puerta de hierro para mirar. En ese instante salió una bocanada de humo y la bruja se deshizo. Solo quedaron un puñado de polvo y un manojo de llaves. Gretel recogió las llaves y corrió a liberar a su hermanito. Antes de huir de la casa, los dos niños buscaron comida para el viaje. Pero, cual sería su sorpresa cuando encontraron montones de cofres con oro y piedras preciosas! Recogieron todo lo que pudieron y huyeron rápidamente.
        
Tras mucho andar llegaron a un enorme lago y se sentaron tristes junto al agua, mirando la otra orilla. ¡Estaba tan lejos! “¿Queréis que os cruce?”, preguntó de pronto una voz entre los juncos. Era un enorme cisne blanco, que en un santiamén los dejó en la otra orilla. ¿Y adivinen quien estaba cortando leña justamente en ese lugar? ¡El papá de los chicos! Sí, el papá que lloró de alegría al verlos sanos y salvos. Después de los abrazos y los besos, Hansel y Gretel le mostraron las riquezas que traían, y tras agradecer al cisne su oportuna ayuda, corrieron todos a reunirse con la mamá.
 
FIN



El valor de los cuentos como parte de la educación y la vida familiar


























Existen numerosos escritos de gente muy reputada hablando de los muchísimos beneficios que tienen los cuentos, no sólo en la educación del niño, sino en la vida familiar. Lo que aquí os presento es una valoración personal de los puntos que considero más importantes, haciendo especial hincapié en aquellos que no se suelen mencionar, pero que pueden ser de gran ayuda.

La mayor ventaja educativa, sin duda ninguna, es la capacidad que tiene un cuento de transmitir valores. Quizás no hayamos reparado conscientemente en ello, pero si lo analizamos, la mayoría de los valores más firmemente arraigados en nuestra propia personalidad llegaron a nosotros de la mano de algún cuento: los 3 cerditos, por ejemplo, nos inculcaron la importancia de trabajar bien; la tortuga y la liebre nos mostraban que la constancia y la modestia tenían su fruto; y la cigarra y la hormiga nos hicieron ver que era más rentable trabajar que ser un holgazán.

Esto no es casualidad. Todas las historias, y los cuentos, tienen un argumento lógico que une las distintas partes, haciéndolas mucho más fáciles de recordar. De esta forma, nuestra memoria almacena precisamente ese hilo argumental porque es el pegamento de todos esos elementos, y por tanto la forma más sencilla de tener acceso al resto de detalles de la historia. Y es precisamente la moraleja el mejor resumen de un cuento, y por tanto lo que mejor retenemos del mismo. Así, por ejemplo, uno puede olvidar detalles de lo que decían la cigarra y la hormiga, pero no olvida que una holgazaneaba mientras la otra trabajaba para almacenar comida.
En segundo lugar, y muy relacionado con lo anterior, está la utilidad de los cuentos para enseñar cosas nuevas. Precisamente por la facilidad con que se recuerda la historia principal, y por su importancia como nexo de unión, el cuento permite acceder fácilmente a los demás detalles. De hecho, las historias han sido utilizadas siempre para transmitir ideas y conocimiento.















Pero además de ser potentes herramientas de educación y enseñanza, los cuentos inventados y personalizados antes de dormir permiten establecer un nexo fortísimo con los niños. Al ser inventados y originales cada día, quien los cuenta debe dedicar toda su capacidad y atención, aunque sólo sea durante ese momento; y eso es algo que los niños, acostumbrados a ser el centro de atención de actos, pero no de pensamientos (muchos padres tienen demasiadas preocupaciones como para aparcarlas totalmente, aunque sólo sea un rato) perciben con gran agradecimiento y entusiasmo. Y al personalizarlos, los padres se obligan a escuchar y atender a sus hijos, y los niños se sienten verdaderamente especiales. Esa carga emotiva tan grande es otro importante factor que facilita la memorización y asimilación de lo enseñado en esos cuentos.
Finalmente, contar cuentos sin libros ni dibujos, con la habitación en penumbra y los niños acostados, es una ayuda muy eficaz para contrarrestar la falta de atención que sufren muchos niños actualmente , provocada por vivir en un mundo con tantos sobreestímulos visuales. Bajo la débil luz del pasillo, y con la tranquilizadora presencia de sus padres, los niños abren sus oídos dispuestos a transportarse al mundo del cuento, y sin darse cuenta, están aprendiendo a centrar su atención; no sólo eso, además lo hacen utilizando el oído como sentido primario, muy al contrario de lo que habrá sucedido durante el día. Yo suelo aprovechar esta situación para estimular aún más su parte visual, pero en el aspecto creativo, que ante tantos estímulos tan perfectamente fabricados, muchos no desarrollan debidamente; así que lleno los cuentos y sus personajes de marcados y vivos colores, obligándoles a imaginar cada parte del cuento.
No quiero acabar sin remarcar las ventajas de personalizar los cuentos. Un cuento personalizado es una herramienta increíblemente eficaz para "analizar" los comportamientos de los niños durante ese día. Aprovechando la cercanía en el tiempo y la frescura de sus recuerdos sobre lo acontecido, mediante el cuento podemos alabar lo que hayan hecho bien, o censurar y tratar de cambiar aquello que no hicieron tan bien. En ese momento tan emotivo, los niños están tan accesibles y dispuestos, que un cuento que ejemplifique claramente la actitud a seguir será mucho más eficaz que varias horas de sermones y buenas palabras.

EL TRAJE NUEVO DEL EMPERADOR

Hace muchos años vivía un Emperador que gastaba todas sus rentas en lucir siempre trajes nuevos. Tenía un traje para cada hora del día. La ciudad en que vivía el Emperador era muy movida y alegre. Todos los días llegaban tejedores de todas las partes del mundo para tejer los trajes más maravillosos para el Emperador.

Un día se presentaron dos bandidos que se hacían pasar por tejedores, asegurando tejer las telas más hermosas, con colores y dibujos originales. El Emperador quedó fascinado e inmediatamente entregó a los dos bandidos un buen adelanto en metálico para que se pusieran manos a la obra cuanto antes. Los ladrones montaron un telar y simularon que trabajaban. Y mientras tanto, se suministraban de las sedas más finas y del oro de mejor calidad.

Pero el Emperador, ansioso por ver las telas, envió el viejo y digno ministro a la sala ocupada por los dos supuestos tejedores. Al entrar en el cuarto, el ministro se llevó un buen susto “¡Dios nos ampare! ¡Pero si no veo nada!”. Pero no soltó palabra. Los dos bandidos le rogaron que se acercase y le preguntaron si no encontraba magníficos los colores y los dibujos. Le señalaban el telar vacío y el pobre hombre seguía con los ojos desencajados, sin ver nada. Pero los bandidos insistían: “¿No dices nada del tejido? El hombre, asustado, acabó por decir que le parecía todo muy bonito, maravilloso y que diría al Emperador que le había gustado todo. Y así lo hizo.

Los estafadores pidieron más dinero, más oro, y así lo hicieron. Poco después el Emperador envió otro ministro para inspeccionar el trabajo de los dos bandidos. Y le ocurrió lo mismo que al primero. Pero salió igual de convencido de que había algo, de que el trabajo era formidable. El Emperador quiso ver la maravilla con sus propios ojos. Seguido por su comitiva, se encaminó a la casa de los estafadores. Al entrar no vio nada. Los bandidos le preguntaron sobre el admirable trabajo y el Emperador pensó: “¡Como! Yo no veo nada. Eso es terrible. ¿Seré tonto o acaso no sirvo para emperador? Sería espantoso”. Con miedo de perder su cargo, el emperador dijo: - Oh, sí, es muy bonita. Me gusta mucho. La apruebo. Todos de su séquito le miraban y remiraban. Y no entendían al Emperador que no se cansaba de lanzar elogios a los trajes y a las telas. Y se propuso a estrenar los vestidos en la próxima procesión.

El Emperador condecoró a cada uno de los bribones y los nombró tejedores imperiales. Sin ver nada, el Emperador probó los trajes, delante del espejo. Los probó y los reprobó, sin ver nada de nada. Y todos exclamaban: “¡Qué bien le sienta! ¡Es un traje precioso!”. Fuera, la procesión lo esperaba. Y el Emperador salió y desfiló por las calles del pueblo sin llevar ningún traje. Nadie permitía que los demás se diesen cuenta de que nada veía, para no ser tenido por incapaz o por estúpido, hasta que exclamó de pronto un niño: - ¡Pero si no lleva nada! - ¡Dios bendito, escuchen la voz de la inocencia! Dijo su padre; y todo el mundo se fue repitiendo al oído lo que acababa de decir el pequeño. - ¡No lleva nada; es un chiquillo el que dice que no lleva nada! - ¡Pero si no lleva nada! – gritó, al fin, el pueblo entero.

Aquello inquietó al Emperador, pues sospechaba que el pueblo tenía razón; mas pensó: “Hay que aguantar hasta el fin”. Y siguió más altivo que antes; y los ayudas de cámara continuaron sosteniendo la inexistente cola.
 
FIN

EL PATITO FEO

domingo, 14 de noviembre de 2010

LOS TRES CERDITOS

¿Conocéis el cuento de los tres cerditos? ¿NO?. Pues no os lo perdáis!!


EL CUENTO DE CAPERUCITA ROJA

ERASE UNA VEZ UNA NIÑA LLAMADA UNA MAÑANA DESALIÓ DE SU  LLEVANDO UNA  CON PAN, TORTAS Y UNA JARRITA DE MIEL PARA SU  QUE ESTABA ENFERMA Y VIVÍA EN EL  cuando se fue al  SE ENCONTRÓ CON EL  QUE LA ENGAÑÓ PARA IR POR EL CAMINO MAS LARGO Y ASÍ ÉL poder LLEGAR ANTES A  DE LA EL  ENTRÓ EN  DE LA  Y ELLA se asustó al verlo. por eso DE UN SALTO SE ESCONDIÓ EN EL  para que el lobo no le hiciera nada. EL  SE DISFRAZÓ DE  Y SE METIÓ EN LA , ESPERANDO A QUE LLEGARA  PARA COMÉRSELA. CUANDO POR FIN LLEGÓ  se asombro, entonces exclamó:
- AY!  QUE  MAS GRANDES TIENES.
SON PARA VERTE MEJOR NIETECILLA.
-AY!  QUE  MAS GRANDES QUE TIENES.
SON PARA OIRTE MEJOR .
- AY!  QUE  MAS GRANDE TIENES.
¡¡¡ ES PARA COMERTE MEJOR!!!
DE UN SALTO EL  SE ABALANZÓ SOBRE  QUE SALIÓ GRITANDO DEL SUSTO. Cuando salió de la casa, se encontró con el Y SU RÁPIDAMENTE EL   CON SU  DISPARÓ. ¡BANG, BANG!. y le DIO SU MERECIDO AL
  . Al oír los disparos, se asustó tanto que JAMÁS VOLVIeron A SABER DE ÉL. 
Y COLORÍN COLORADO ESTE cuento SE HA ACABADO.

                                                              FIN

LOS LIBROS

¡Adelante! Podéis pasar...

Hola a todos/as, soy Loide estudiante del 2º curso de educación infantil. Este blog va dirigido especialmente a niños, ya que en el podremos encontrar diferentes cuentos con historias muy variadas, y con diversos efectos. Pero eso no significa que a él no puedan acceder los adultos, sino todo lo contrario. En él los mayores también podrán aprender diversos cuentos, las diferentes estrategias o métodos para poder mostrarlos de la manera más divertida, etc.,  así les será mucho más sencillo aplicarlos hacia los más pequeños.
Como habéis podido comprobar el fin de este blog, es que los niños se interesen mucho más por la lectura, de una manera diferente y divertida, ya que actualmente este es un tema que se tiene un poco abandonado. No dudéis en entrar en Cuéntame un cuento, para poder también compartir diversas opiniones y sugerencias.

¡Un saludo! Besos